No cabe duda que la mayoría nos refugiamos en la tecnología para combatir el tan difícil aislamiento social obligatorio, ya sea queriendo estar informado minuto a minuto sobre los avances del Coronavirus o COVI 19, para saber cómo avanzan sus nefastas consecuencias, nuevos mecanismos de prevención, o saber como va la tan ansiada cura; esta cuarentena ha llevado incluso al Poder Judicial a implementar procedimientos de recepción de documentos para temas urgentes solo vía correo electrónico, porque el coronavirus nos agarró desprevenidos a todos y los proyectos que tenía esta institución, así como el Ministerio Público, sobre la implementación del expediente electrónico se quedó solo en programas pilotos.
Es la tecnología una herramienta importante, ya casi indispensable en nuestra vida y mientras siga avanzando creará y descubrirá vulnerabilidad en nuestra sociedad, por ello la normativa nacional se amplió en este ámbito y en el año 2013 emitió la ley denominada “Ley de Delitos Tecnológicos,” tipificando delitos que aún no son conocidos claramente o que siguen confundiéndose con delitos anterior.
¿QUÉ DELITOS TECNOLÓGICOS CONTEMPLA LA LEGISLACIÓN PERUANA?
Como primer delito la norma contempla a quien accede, altera o destruye un sistema informático, sin autorización y vulnerando sus medidas de seguridad, estas conductas pueden llevar penas de hasta 6 años, luego vienen los delitos más graves como el uso de herramientas tecnológicas para realizar proposiciones a menores.
En otro capítulo de la misma ley están los delitos informáticos contra la intimidad y el secreto de las comunicaciones, o más conocido como tráfico o intercepción ilegal de datos, este es una de las modalidad más conocidas, todos sabemos que existe un mercado negro en el centro de Lima donde venden nuestros datos, en el mejor de los casos estos se usan solo para temas comerciales pero por el peligro que genera esta actividad puede ser sancionado hasta con 10 años si los datos se refieren a la seguridad o defensa nacional.
Luego vienen los delitos más comunes, los delitos tecnológicos contra el patrimonio o conocido como fraudes informáticos, solo durante el año 2019 se registraron 3,012 de casos a nivel nacional, este delito consiste en el aprovechamiento de cualquier herramientas tecnológicas en beneficio del autor o de terceros, en perjuicio de otro; entre las principales modalidades tenemos la clonación de tarjetas, transacciones no autorizadas, compras no reconocidas, este delito se sanciona hasta con 10 años de pena privativa de libertad.
Finalmente, la norma contempla la suplantación de identidad y el delito de abuso de mecanismos o dispositivos informáticos sancionados con hasta con 5 años de pena.
¿QUÉ DELITOS SON LOS MÁS COMUNES EN ESTA ÉPOCA DE CORONAVIRUS?
En otros países donde las cuarentenas tienen más tiempo aplicándose, se han incrementado los casos de fraudes informáticos, en España por ejemplo los delincuentes han creado software malicioso difundido a través de aplicaciones y web que atraen a las víctimas con información para identificar los síntomas del coronavirus o mapas de la pandemia, cuyo objetivo es recabar información sensible como cuentas bancarias, preferencias comerciales, entre otra información que luego usaran en su beneficio, la policía de este país refiere que Ciberestafas, hasta ahora vinculadas a sexo o a falsas ofertas para ganar dinero, han mutado hacia la pandemia.
La EUROPOL ha difundido una serie de consejos para garantizar unas condiciones mínimas de ciberseguridad, recomendando:
- Para la seguridad en el hogar, cambiar la contraseña por defecto del router, revisar los permisos de las aplicaciones y eliminar las que no se usen, realizar copias de seguridad y actualizar los software, usar contraseñas (PIN o información biométrica) diferentes, instalar antivirus y revisar la privacidad.
- Respecto a las compras online, las recomendaciones se centran en la fiabilidad de los vendedores, el uso de tarjetas de crédito y revisar periódicamente la cuenta bancaria. Además de no responder a mensajes sospechosos, abrir enlaces o archivos de dudosa procedencia, no compartir detalles personales o noticias no fiables, etc.
- Para la infancia al ser otro foco vulnerable en la red, recomiendan revisar la seguridad de los juguetes inteligentes (contraseñas, privacidad, accesos, etc.), usar el control parental, hablar con los niños sobre ciberseguridad y escucharlos
- Para las empresas, aconseja establecer protocolos claros de procedimiento para el teletrabajo y que sean probados antes de utilizarlos por primera vez. Siendo el acceso remoto una de las bases del teletrabajo, recomienda usar la red corporativa a través de la VPN (Red Privada) de la empresa y usar factores de autenticación múltiples que caduquen, tener todos los sistemas actualizados, reforzar la seguridad, sensibilizar al personal al respecto y asegurar la comunicación interna. Lo más recomendado para que los empleados trabajen desde casa es que usen dispositivos proporcionados por la empresa, y si no es posible, que el equipo personal esté actualizado y cuente con antivirus.
El grupo de Energías de Portugal (EDP) sufrió el pasado lunes un ataque informático en su red corporativa durante el que fueron robados datos personales de cientos de clientes, EDP es uno de los gigantes eléctricos europeos, con 10 millones de clientes y 12 000 trabajadores en el mundo y cuenta con filiales en el Estado español, Brasil y Estados Unidos, pese a sus mecanismos de seguridad de la información cuando hablamos de tecnología nunca se podrá estar seguro porque esta avanza todos los días.
En Colombia también los delitos informáticos aumentaron en la cuarentena, se detectaron alrededor de 200 páginas que tienen contenido malicioso para robar información, el Jefe del Centro Cibernético de la Policía Nacional, declaró que la pandemia ha sido una oportunidad para que el cibercrimen llegue a través de mensajes falsos o correos electrónicos, en los que se han logrado robar datos importantes de los colombianos y las experiencias comparadas siguen, pues no solo se tiene a la víctima más accesible sino que a esto se suma el tiempo libre, la necesidad económica, entre otras causas por las que estos delitos van a continuar incrementándose.
Y claro que el Perú no es ajeno a esto, solo a fines de marzo la División de Delitos Informáticos de la Policía informó la captura de cinco sujetos acusados de estafar a ciudadanos con la elaboración de un registro para el cobro del bono de 380 soles, así como para recibir el servicio de Netflix, estos sujetos engañaban a las personas, pidiéndoles todos sus datos personales, incluido sus números de cuenta bancaria, para elaborar un supuesto registro, la misma División detuvo a dos sujetos que, a través de las redes sociales, azuzaban a la población a cometer saqueos durante la emergencia, entre otras acciones detectadas.
Este artículo tiene un corte preventivo, nos sumamos a las recomendaciones de la EUROPOL, sabemos que las políticas de seguridad de la información son débiles en nuestro país, pese a que existe una Ley de Protección de Datos y una Ley de Delitos Tecnológicos aún nos falta mucho camino por andar, la mejor protección siempre será la prevención y si has sido víctima de alguno de estos delitos no dudes en escribirnos al correo asesor@legal.pe, donde nuestro equipo legal de penalistas y de otras áreas como la corporativa, te podremos asesorar sobre cómo proceder, incluso ante las entidades bancarias.